Tras el anuncio del acuerdo en el Pacto de Toledo, llegan los matices. El texto lo presenta así de genérico: "La revalorización anual de las pensiones en base al IPC real se presenta como el mecanismo que ha de servir para conservar el poder adquisitivo de las pensiones".

Para Podemos está muy claro: se refiere al IPC real. "Se habla de IPC real y de revalorizar respecto a esto", asegura Aina Vidal, diputada de En Comú Podem.

Por su parte, el PSOE dice que con ellos el IPC está garantizado. "Aquel que quiera en un futuro plantear una alternativa, tendrá que explicarlo y muy bien", asegura Mercè Perea, portavoz de PSOE en el Pacto de Toledo.

Con Ciudadanos llega el matiz. Hablan del IPC como eje central, pero no exclusivo. "No podemos cerrar los ojos a la demografía o al crecimiento económico porque, entonces, simplemente nos estaríamos engañando", añade Toni Roldán, diputado de la formación naranja.

En esa línea, también el PDeCAT insiste en que el texto del acuerdo abre la puerta a otras variables. "La recomendación que alcanzó el acuerdo habla del año 2011, cuando se hablaba de otros factores", señala Carles Campuzano.

Para el Partido Popular "pueden ser utilizados otros indicadores, pero le corresponde al Gobierno realizarlo", según Gerardo Camps, portavoz del partido en el Pacto de Toledo.

Los pensionistas ven positivo el acuerdo pero denuncian que se queda corto. "Queremos una solución completa, no soluciones parcheadas que sabemos que a nadie satisfacen", indica el coordinador de Defensa del Sistema Público de Pensiones.

Sólo falta Esquerra por sumarse a este pacto, que además es solo una recomendación que el Gobierno debe concretar.