El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha dicho que la labor realizada por la Sareb, el banco malo español, en su aproximadamente un año de vida "tiene más luces que sombras", y ha supuesto una ayuda crucial para el sistema financiero y para la economía. En cuanto a los posibles conflictos de intereses dentro de la entidad, a los que se refirió la semana pasada el presidente del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), Fernando Restoy, el ministro ha dicho que "hay que continuar actuando con limitaciones en conflictos de intereses".
También ha señalado que hay que seguir pidiendo "transparencia y rigor" al equipo directivo de una entidad que cuenta con códigos de conducta para sus consejeros y sus trabajadores. En respuesta a una interpelación del Grupo Socialista en el Congreso sobre los últimos ceses y dimisiones vividos en la entidad, y sobre los trabajos que ha llevado a cabo desde su puesta en marcha, De Guindos ha indicado que la Sareb "no es parte del problema, sino parte de la solución".
Lo que ha hecho la Sareb, ha dicho el ministro, que es establecer "desde cero un registro y una operativa, no tiene parangón en ningún sitio", en términos de eficacia y de transparencia, y además ha mejorado clarísimamente la solvencia del sistema bancario español. Asimismo, ha contribuido a evitar algo que hace apenas dos años se veía como ineludible, "una misión imposible", que era evitar el rescate de España.
Pese a la insistencia del diputado socialista Valeriano Gómez sobre la opacidad de la Sareb en torno a las causas de algunos cambios en su equipo directivo, De Guindos se ha centrado en lo que ha supuesto para la reforma del sistema financiero el traspaso de más de 200.000 activos de la banca. Al tratarse de una transmisión en bloque, ha recordado, ni las propias entidades financieras ni el supervisor sabían verdaderamente lo que se transfería, pero gracias a eso se ha podido sanear el sistema bancario y cerrar la línea de ayuda financiera sin prorrogas.
Se ha referido en concreto al traspaso de activos de Bankia, que ha permitido a la entidad comenzar una nueva etapa; la Sareb, por su parte, está vendiendo los activos a buen ritmo. Si no se hubiera procedido de esta forma, y no se hubieran transferido a la Sareb esos activos, se tendrían que haber vendido esas carteras de activos con un coste estimado de unos 20.000 millones de euros, o haber establecido un esquema de protección de activos "que todos sabemos sus consecuencias". De Guindos ha querido destacar también que la Sareb no cuenta con activos de particulares, por lo tanto "no desahucia a nadie" ya que sus activos proceden del sector promotor.