La Audiencia Nacional retoma el juicio por la salida a bolsa de Bankia con su expresidente, Rodrigo Rato, respondiendo de nuevo a Anticorrupción tras cuatro semanas de parón por la ausencia de la fiscal Carmen Launa, aún de baja médica.
Según han informado fuentes jurídicas, aún está por ver cómo solventa el Ministerio Público la ausencia temporal de su representante para el resto de sesiones programadas, después de que la sala acordara reanudar el calendario inicialmente marcado.
Una vez solicitada la opinión a las partes, la sección cuarta de la sala de lo Penal atendió parcialmente las peticiones de acusaciones y defensas, partidarias de celebrar "con urgencia" la vista, aunque modificando el orden para adelantar la declaración de la treintena de personas a las que no acusa la Fiscalía.
Así pues, tras Rato, los primeros en tomar la palabra serán los exdirectivos de la entidad, el socio auditor y los representantes de Bankia, su matriz, BFA, y la firma Deloitte.
Acto seguido, intervendrán los otros tres exadministradores de hecho del banco, José Luis Olivas, José Manuel Fernández Norniella y Francisco Verdú, para los que Anticorrupción pide entre cuatro años y dos años y siete meses de cárcel.
Sin embargo, la solución no cumple por completo con las propuestas de acusaciones como la Confederación Intersindical de Crédito (CIC), que si bien apoyó mantener suspendido el juicio hasta la próxima semana, rechazó que tuviera que alterarse el orden al entender que el Ministerio Público está interesado en escuchar a todos los acusados por igual.
Tampoco cumple con la respuesta de la Fiscalía, a favor de celebrar una única sesión antes de que expirara el plazo del mes que establece la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECrim), y esperar a la total recuperación de Launa, ya que la "complejidad" del proceso hacía imposible encontrar un sustituto.
De momento, Rato, que se enfrenta a penas de entre cinco años y doce años de prisión por estafa a los inversores y falsedad contable, se dirigirá a los estrados por tercer día en lo que va de juicio.
En las sesiones previas, el exministro se amparó en el conocimiento del Banco de España, de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y del Gobierno para defender una operación que fue "una estrategia del Congreso de los Diputados" y en la que se advirtió al inversor "de todos los riesgos" en su folleto.
Aunque el interrogatorio de la Fiscalía ha girado por ahora en acontecimientos previos a su salida de la entidad el 7 de mayo de 2012, Rato avanzó que su marcha de Bankia vino motivada por el entonces "presidente del Gobierno", Mariano Rajoy, quien le "echó" del cargo, dando inicio a la "intervención política" del banco.
Durante su intervención, no faltaron los reproches a la fiscal Launa, cuya incorporación pública al procedimiento se produjo el pasado 26 de noviembre, primera jornada de la vista en la que estuvo acompañada por el fiscal jefe, Alejandro Luzón, encargado además del caso durante la fase de instrucción.
Especialmente notoria resultó su exposición de cuestiones previas, en las que anunció un posible cambio de calificación del escrito inicial, que sólo se dirige contra Rato, Olivas, Norniella y Verdú, por estafa a los inversores.
Con ello abría las puertas a ampliar los cargos inicialmente atribuidos y contemplar un posible delito de falsedad contable que afectaría a la treintena de exdirectivos del grupo financiero y al socio auditor, que se enfrentan a penas de hasta doce años de cárcel solicitadas por las acusaciones particulares y populares.