El Gobierno aprobará una ley en la que ampliará la definición de pyme para que más empresas entren en esta categoría y sea más fácil que fluya el crédito, según ha anunciado el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos.

En una entrevista, De Guindos ha explicado que conceder crédito a las pymes tiene para la banca la ventaja de que consume menos capital que la financiación a grandes empresas, de acuerdo con la nueva regulación internacional. De ese modo, si se amplía el concepto de pyme y se incluyen en él a más empresas de menos de 250 trabajadores, se favorecerá la concesión de crédito a la economía real, ha argumentado el ministro.

Aún así, además del número de empleados, para ser una pyme se tendrán en cuenta otros parámetros que establecerá el Banco de España como el volumen de negocio, que actualmente impide considerar como pyme a una empresa que facture más de 50 millones de euros.

Por el momento, el supervisor bancario ya ha hecho una propuesta para fijar los nuevos requisitos para ser una pyme, con los que entrarían un "porcentaje importantísimo" de empresas españolas, según De Guindos.

Actualmente se entiende por pequeña empresa la que cuente con entre 10 y 50 empleados, y por mediana, la de menos de 250, si bien se debe tener en cuenta el volumen de negocio y el tamaño del balance de la compañía, lo que impide que algunas compañías sean consideradas pymes a pesar de tener menos de 250 trabajadores.

Además, la aprobación de esta ley financiera también impedirá que a una pyme que esté al día en el pago de intereses y del principal de una financiación bancaria, ésta se le retire sin preaviso, para que pueda encontrar de forma efectiva financiación alternativa.

El ministro de Economía insiste en que ha llegado el momento de que el crédito fluya pues, a diferencia de hace un año o año y medio, España cuenta ahora con una banca solvente y la demanda de financiación aumentará al percibirse la recuperación económica.

Según sus previsiones, este mismo año la financiación concedida por la banca a las empresas con la mediación del ICO será mayor que en 2012 y el próximo ejercicio, De Guindos confía en que crecerá el crédito a las pymes.

Y, lejos de hacerlo en el sector inmobiliario, que tiene que seguir reduciendo su endeudamiento "de forma muy importante", el crédito deberá ir a aquellos sectores que, como la exportación, sirvan de palanca para el crecimiento económico.

"Uno de los objetivos y de los principios fundamentales va a ser la financiación de la exportación española porque ha habido circunstancias en las cuales también nos hemos encontrado alguna dificultad, por ejemplo, cuando ha habido algún concurso importante en el extranjero", ha puesto como ejemplo el ministro.

Por eso ahí se está haciendo un esfuerzo y se va a llegar a un acuerdo con entidades multilaterales, incluso con el Banco Europeo de Inversiones (BEI), para que todo lo que tiene que ver con la financiación del comercio exterior se vea facilitado.

De Guindos ha recordado que en la última cumbre europea se decidió reforzar el papel del BEI y será en la reunión de septiembre del Ecofin, en Lituania, donde se presentarán propuestas concretas y se tomará una decisión al respecto para que empiece a funcionar.

Por otro lado, De Guindos ha insistido en que el ICO debe jugar un papel importante y ha destacado el mayor uso en los últimos meses de las líneas de intermediación, así como la puesta en disposición del dinero fruto del acuerdo con el Banco estatal alemán de Crédito para la Reconstrucción y el Desarrollo.