La central térmica de Andorra (Teruel) desmantelada hace dos años se convertirá en uno de los mayores campos de energía solar, eólica e hidrógeno de Europa. El plan pretende darle el relevo definitivo al carbón del que vivió la zona.

Hasta siete proyectos de energías renovables se van a levantar en la antigua central, con una inversión prevista de 1.500 millones de euros. El objetivo es el paso a la transición energética. Se estima la creación de 6.500 puestos de trabajo durante la construcción, así como otros 500 de manera permanente.

El proyecto prevé dar empleo a personas con discapacidad, que cultivarán plantas aromáticas y levantarán las lindes vegetales de los parques eólicos. O como Roberto, apicultor local, que explica a laSexta cómo pretenden instalar las colmenas en los parques para potenciar, posteriormente, el turismo en la zona.

José Alfredo es otro vecino que podrá continuar y ampliar su iniciativa: 'Apadrina un Olivo'. Gracias a su trabajo ha conseguido que 7.000 personas pongan dinero para rehabilitar la tradición olivera de esta zona, construyendo una almazara, por ejemplo. La intención es que la rueda de las renovables eche a andar en España y ofrezca frutos para todos.