La Comisión Europea ha corregido los números del programa de estabilidad enviado por España a Bruselas para los próximos años y ha concluido que tampoco cumplirá en 2017 el objetivo de colocar el déficit por debajo del 3%, tal y como se comprometió a hacer con la UE para este año.

"En muchos Estados miembros se prevé que el déficit siga cayendo en 2016 y 2017. En la Eurozona, esperamos que sólo Francia (3,4%), España (3,9%) y Grecia (3,1%) sitúen su déficit por encima del 3% este año", ha anunciado el comisario de Asuntos Económicos y Financieros, Pierre Moscovici, en una rueda de prensa para presentar las previsiones macroeconómicas de primavera.

El Ejecutivo comunitario prevé que España sume un 3,9% de déficit este año, tres décimas por encima del cálculo del Gobierno, y que sea del 3,1% en 2017, cuando Madrid espera haberlo rebajado al 2,9%. Ello contradice la posición defendida por el ministro de Economía, Luis de Guindos, que plantea que será suficiente un año de prórroga para recolocar las cuentas en las cifras comprometidas con la UE.

El comisario no ha querido valorar el impacto que pueda tener en la senda de reformas las elecciones del próximo 26 de junio: "Tendrán que esperar un poco. No tengo ningún comentario que hacer sobre la elección democrática que harán los españoles. Y tendrán que esperar también para conocer nuestras decisiones".

En cualquier caso, el comisario económico ha juzgado que los resultados macroeconómicos de España "siguen siendo muy buenos", aunque "deban hacerse algunos esfuerzos más" en el plano de las cuentas públicas.

Bruselas también enmienda los cálculos de crecimiento y lo sitúa en un 2,6% en 2016 frente al 2,7% del Gobierno, si bien es más optimista de cara a 2017, para el que pronostica un alza del PIB del 2,5% en lugar del 2,4%.

Las previsiones macroeconómicas de primavera presentadas por el comisario de Asuntos Económicos y Financieros, Pierre Moscovici, serán la base para decidir en las próximas semanas si abre el expediente sancionador a España por incumplimiento y exigir al Gobierno medidas adicionales para corregir el desvío.