Mucho ha pasado desde ese momento en que Carlos Alcaraz levantó el US Open.Desde que Alcaraz alzó al cielo su primer Grand Slam. Desde que se convirtió en el número 1 más joven de la historia de la ATP. Desde ese día, el murciano no había ampliado su palmarés... hasta ahora. Hasta Argentina. Hasta una final en la que venció a Norrie por 6-3 y 7-5.

Un total de 161 han pasado entre un momento y otro. Para ser, tras su victoria ante el británico, el campeón más joven del torneo y recoger así el testigo de otro español que conquistó Argentina, como Rafa Nadal. También Juan Carlos Ferrero ganó dicho torneo, uno en el que Alcaraz ha recuperado sensaciones tras tiempo de baja.

El de El Palmar empezó expectante, rompiendo el saque en el 4-3 y volviendo a hacerlo para cerrar el primer set. En cuanto al segundo, lo comenzó con un 3-0 y se hizo con el mando. La final era suya, pero el inglés no se rindió y puso en apuros al de Murcia.

"Me he sentido muy cómodo en esta final. Iba a ser complicado, lo sabía, pero estaba centrado", cuenta.

Y sigue: "Es el nivel con el que tengo que jugar una final. He estado cuatro meses fuera, y no hice las cosas correctas fuera de pista. Me sentí culpable después de la lesión".

"No fue fácil, pero venir aquí y ganar cuatro meses después es especial", sentencia.