El comienzo de temporada de Sebastian Vettel, la última para él en Ferrari, se está convirtiendo en una pesadilla. El alemán no se siente cómodo en el coche y la gran muestra es su décimo puesto en el GP de Gran Bretaña de este fin de semana.
Y al finalizar la prueba estalló. "Este fin de semana el coche y yo no nos encontramos. Tuve problemas para cambiar mi estilo de conducción cada dos o tres vueltas, pero al final, tenía muy, muy poca fe en el coche", expresó en el medio alemán 'RTL'.
"No fue una carrera muy estresante, simplemente no tuve opciones. La gente a mi alrededor era más rápida que yo. El coche fue muy complicado de conducir. Sufrí muchísimo para encontrar la confianza y no sé por qué", explicó el cuatro veces campeón del mundo.
Y dejó una frase que está dando mucho que hablar entre los 'tifosi': "Hay algo malo en alguna parte, conmigo o con el coche. Pero, si sufrí durante tantas vueltas en carrera, y fue desde el principio hasta el final, entonces es que hay algo que probablemente no cuadra".
Vettel cae a la decimotercera posición del Mundial tras sumar un único punto en Silverstone. Su compañero en Ferrari, Charles Leclerc, volvió a firmar el milagro y subió al podio junto al ganador Lewis Hamilton y Max Verstappen. El monegasco camina quinto en el Mundial de pilotos, a apenas tres puntos del cuarto, Lando Norris.