Red Bull no hizo comunicado alguno tras las palabras de Nelson Piquet a Lewis Hamilton, cuando usó el término 'negrito' para referirse al piloto inglés de Mercedes. Ahora, Christian Horner, jefe de Red Bull y de Max Verstappen, ha justificado el silencio de su escudería ante el que es el tema de la semana del Mundial de Fórmula 1.

Y es que, según ellos, no tuvieron necesidad alguna de pronunciarse sobre las palabras de Piquet, que además es el suegro de Verstappen, por lo sucedido con Juri Vips días antes.

"Publicamos un comunicado sobre él y luego salió esto. Pensamos que ya hicimos una declaración de intenciones fuerte retirándole del equipo. Demostramos que condonamos cualquier forma de racismo o de discriminación", dice Horner.

Y prosigue: "Estamos consternados por los comentarios de Nelson. Es una entrevista de hace tiempo, pero nosotros tuvimos un caso con uno de nuestros pilotos jóvenes la pasada semana. Tomamos medidas muy decisivas".

Horner continúa justificando la decisión de Red Bull: "Ya se hizo una declaración sobre Juri. Hacer luego otra con Piquet... Claro que apoyamos a Hamilton, pero sentimos que las acciones hablan más que las palabras. Fuimos muy severos con Juri".

"Max dejó claro que es partidario de apoyar a Hamilton. No solo a Hamilton, sino de posicionarse contra toda forma de racismo o discriminación en el deporte", cuenta Horner.

El jefe de Red Bull saca pecho por su escudería: "Tenemos una afición joven, diversa. Somos un equipo muy inclusivo. Por supuesto que Lewis va a tener un gran apoyo aquí".

"No es agradable escuchar que se abuchea a un piloto. No es habitual que pase aquí, en Gran Bretaña, que se aprecia a todos. Pero Max lo acepta, Hamilton es favorito aquí y no tengo problema con eso. En Austria nosotros tendremos un apoyo enorme", sentencia.