Todo el mundo de la Fórmula 1 se ha unido esta semana para cargar y condenar a Nelson Piquet por sus palabras en referencia a Lewis Hamilton.

El tricampeón brasileño, en una entrevista del pasado mes de noviembre, se refería al británico como "el negrito" a la hora de analizar su choque con Max Vertappen en Silverstone.

Tras hacerse virales las declaraciones y después de recibir muchas críticas, el expiloto pidió perdón, aunque aseguró que se había hecho una traducción errónea de sus palabras.

Pues bien, eso no le ha permitido esquivar la sanción dela Fórmula 1, ni las críticas de los pilotos en la rueda de prensa previa al Gran Premio de Gran Bretaña.

Uno de los más contundentes ha sido Fernando Alonso, excompañero de Lewis Hamilton en McLaren en 2007.

El asturiano se ha mostrado inflexible al respecto: "No hay lugar para ese tipo de declaraciones y la reacción de toda la comunidad de Fórmula 1 fue bastante grande, lo cual es bueno".

Eso sí, dice que es "difícil" imponer un castigo mayor: "Es difícil decir qué acciones deben seguir a las palabras, porque los pilotos dependemos del apoyo de la FIA y la FOM y de lo que hacen ellos".

"Lo más importante para nosotros, los pilotos, era mostrar nuestro apoyo a Lewis. Estamos detrás de él. Es bueno que la reacción de todos haya sido mucho mejor que en incidentes anteriores, aunque probablemente no sea suficiente. Sin duda es la dirección correcta la que hemos tomado, y tenemos que seguir adelante", ha zanjado.