La Fórmula 1 llegará a Madrid a partir de 2026. Esta realidad se ha confirmado este martes en un evento en el que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de la ciudad, José Luis Martínez-Almeida, han arrojado cifras dispares acerca del impacto económico de esta cita.

Para Martínez-Almeida, este Gran Premio traerá 500 millones de euros de beneficio, mientras que Ayuso lo deja en 450 millones. La presidenta regional habla de la creación de 10.000 empleos, por los 8.200 que estima la Cámara de Comercio. Mientras tanto, la oposición se queja de que los 'populares' no han compartido los documentos de los que sacan los datos.

Lo cierto es que valorar el impacto de un acontecimiento de este tipo es muy complejo. Pese a que hay informes positivos al respecto, un grupo de investigadores de Noruega ha concluido que albergar una carrera de Fórmula 1 no produce efectos positivos sobre el PIB, el empleo ni el turismo. Es más, aseguran que a la larga el coste de oportunidad no compensa, se infla el precio de las casas y el humo ahuyenta a turistas.

Sobre el dinero público que costará este Gran Premio, Martínez-Almeida defiende que serán "cero euros". No obstante, la última vez que alguien hizo una afirmación semejante el agujero acabó siendo de 300 millones de euros. Fue Francisco Camps, expresidente de la Generalitat Valenciana, quien aseguró eso del GP de Valencia, una afirmación que 'le salió rana' con el paso de los años.