El 'crashgate'. Más de 15 años han pasado tras un hecho que abochorna todavía a día de hoy al mundo de la F1. Que tiene, en 2023, a Felipe Massa reclamando ese Mundial que fue para Lewis Hamilton. Que dejó una victoria de Fernando Alonso en esa época en Renault tras su paso por McLaren. Y que bien pudo haber acabado por completo con la marca del rombo.

Porque hicieron estrellarse adrede a Nelsinho Piquet. Porque le ordenaron que se fuera contra el muro por el bien de su contrato y para favorecer a Alonso en Marina Bay. En Singapur. Para que apareciera un 'safety car' en pista justo en el momento en que mejor le iba al asturiano. Sí, todos los ingredientes necesarios para un buen castigo.

Sin embargo solo rodaron dos cabezas. Las cabezas de Flavio Briatore y Pat Symonds. Los cerebros de todo. Los artífices del 'Crashgate'. Los responsables de todo en un equipo en el que ya estaba Cyril Abiteboul.

"La pregunta es..."

En el que ya estaba quien terminaría siendo jefe de Renault y quien iba a ser el mandamás en la época de Alonso en el renombrado equipo Alpine. Pero, en ese lejano 2008, su labor prácticamente carecía de responsabilidad.

Ahora ha hablado en declaraciones que recogen en 'SoyMotor' sobre lo sucedido en Singapur 2008: "Fue la única vez en la historia que Renault ha sido portada en el New York Times".

"La pregunta es si eso fue realmente buena publicidad o no", cuenta el francés.

Eso sí, agradece que todo se quedara donde se quedó: "Flavio y Symonds fueron los cerebros de todo. Los únicos que cayeron. El resto del equipo pudo sobrevivir, aunque en términos de reputación..."

"En aquel momento era un idiota"

"En aquel momento era un idiota. No tenía ni idea de lo que pasaba. Pensábamos que todo era increíble, que la vida seguía adelante. Fue en primavera de 2009 cuando todo salió a la luz", cuenta.

Ahí fue cuando todo estalló: "Tuve que lidiar con asuntos legales, que coordinar la investigación con los abogados".