"Apenas tenemos 'porpoising'...". Esto decían en Alpine nada más finalizar la carrera de Bakú, en la que tanto Fernando Alonso como Esteban Ocon terminaron en los puntos.
Algo muy importante porque la FIA se ha puesto manos a la obra. Este jueves ha emitido un comunicado anunciando las medidas para evitar el efecto rebote, que apenas afecta a la escudería gala.
Sobre todo Mercedes, casualmente el equipo que más se ha quejado, es el que más sufre. Y esta queja se le podría volver en contra. Porque en caso de elevar su coche perderían bastante rendimiento
Y las flechas de plata luchan por la zona media, una zona en la que también se encuentra Alpine. Y la FIA podría haber provocado que Mercedes pierda esa pelea.
Ferrari es otra de las escuderías más afectadas. Charles Leclerc y Carlos Sainz sufrieron este 'porpoising' en Bakú, donde ninguno de los dos terminó por problemas de fiabilidad.
Ferrari y Mercedes, los más perjudicados. Red Bull y Alpine, los más beneficiados. Estas medidas de la FIA podrían tener consecuencias directas en el campeonato.
Hamilton, el más 'protestón'
Al finalizar la carrera de Bakú, Hamilton protagonizó la imagen del fin de semana. Apenas se podía bajar de su Mercedes debido a sus dolores de espalda. Unos dolores que achacaba al rebote.
"Hubo muchos momentos en los que no sabía si lo iba a conseguir. Simplemente si iba a mantener el coche en pista, por que no sé si lo habéis visto, pero casi perdí el control a alta velocidad varias veces. Al final, en las últimas 10 vueltas hasta la bandera a cuadros, solo tenía que ir diciéndome por dentro en plan 'puedes hacerlo, lo tienes. Solo aguanta'", ha dicho el siete veces campeón.
Pero en el paddock sospechaban. Ni Lando Norris ni Red Bull se creían estos problemas. Christian Horner dijo que la solución era sencilla: levantar el coche. Algo a lo que obligará la FIA... y perjudicará a Mercedes.
Tribunales
La fiscalía sueca archiva la investigación por violación con la que se relacionaba a Mbappé
El contexto En una reciente entrevista, Mbappé dijo que "nunca" se había sentido preocupado por el caso. Aunque reconoció que "hay mucho ruido", aseguró que había intentado concentrarse en su trabajo.