El 'suflé' de Aston Martin se ha ido desinflando en los últimos Grandes Premios, ya que han sido unas carreras en las que los resultados han estado lejos de lo que se esperaba de ellas. Han estado tan lejos que los seis podios logrados han quedado ya como una simple anécdota.
Por ello, tras la novena posición obtenida en el GP de Hungría, Fernando Alonso ha sido bastante autocrítico con la situación del equipo, pero siempre optimista con lo que se espera de después del parón de verano.
Y es que, en unas declaraciones recogidas por 'Motorsport', Fernando ha confirmado que ya no son ni tan si quiera el tercer equipo: "Estamos detrás de los Mercedes, Red Bull, Ferrari y McLaren, que es más o menos lo que vimos en la clasificación y más tarde en la carrera".
"Tenemos que ver muchas cosas, ahora nos toca entender qué está haciendo el coche ahora en comparación con el principio de temporada, cuántas mejoras hemos traído en comparación con nuestros principales competidores, y luego entender mejor los nuevos neumáticos", afirma el español.
Asimismo, el ovetense es consciente de que el ritmo de carrera de su monoplaza está lejos de el de las primeras carreras de la temporada: "En la carrera, normalmente todo se equilibra y los grandes equipos acaban delante. Y sí, estamos justo en la parte de atrás de esos equipos punteros. Así que tenemos que volver a la parte delantera de ese grupo".
"Siempre intentamos introducir cosas como hace todo el mundo. Algunas de esas cosas a veces funcionan mejor de lo esperado y otras peor, pero esperemos que el próximo paso por nuestra parte sea bueno", concluye Alonso.
Zandvoort, cita clave
Si bien es cierto que Aston Martin no está en su mejor momento de la temporada, todavía se mantienen terceros en constructores y ya están a la espera del nuevo paquete de mejoras que llegará en el GP de los Países Bajos.
Un Gran Premio clave para que las balas verdes vuelvan a la parte delantera de la parrilla y Fernando Alonso pueda tratar de ponerle las cosas difíciles a un Max Verstappen que ya acaricia su tercer mundial.