Son muchos los equipos que tienen establecidas una serie de multas en caso de que los jugadores incumplan las normas, como llegar tarde a los entrenamientos o tener un mal comportamiento. Sin embargo, se han dado a conocer las multas que Steven Gerrard ha impuesto a sus futbolistas en el Aston Villa en caso de que no cumplan las normas.

Esta lista se ha filtrado y da a conocer detalles difíciles de creer. Por ejemplo, la multa más cara es por llegar tarde a una reunión o al entrenamiento un día de partido. Si algún jugador hace eso, tendrá que pagar 1.000 libras (casi 1.200 euros).

Por llegar tarde a entrenar otro día, la multa es de 500 libras (casi 600 euros). Si en un día que no hay partido se llega tarde a una reunión o al campo de entrenamiento, el jugador deberá abonar 200 libras (casi 240 euros) por cada minuto que se retrase.

Si no se avisa al doctor antes de las 10 de la mañana de una nueva lesión o enfermedad o llegar tarde a un tratamiento con el fisio supondrá una multa de 200 libras.

Normas surrealistas

Sin embargo, hay otras multas surrealistas como ducharse sin chanclas o no traer una tarta el día de tu cumpleaños. Por lo primero, el jugador pagaría 100 libras (casi 120 euros) y por lo segundo 50 libras (casi 60 euros) por cada día que ocurriese.

Si un jugador ve tarjeta amarilla en un partido por protestar, deberá pagar 200 libras. Además, si es expulsado, dicho jugador deberá invitar a comer a toda la plantilla las siguientes cuatro semanas.

Si no se llevan a entrenar el GPS o aparcan de manera ilegal, los jugadores serán multados con 100 libras. Por llegar tarde a la grabación de un anuncio, serán 250 libras (casi 300 euros de multa).

Gerrard, muy estricto

En caso de que no recojan sus objetos personales de entrenamiento o los platos y utensilios después de la comida, los jugadores del Aston Villa deberán pagar 100 libras de multa por cada utensilio olvidado.

Por último, Gerrard también cuida además del orden y la disciplina, la vestimenta de sus jugadores. Por cada prenda inapropiada que lleve un jugador un día de partido, se deberá abonar una multa de 100 libras.

Sin embargo, aún queda la guinda del pastel. Y es que los jugadores deberán votar quién ha sido el peor en el entrenamiento previo al día del partido y el elegido deberá llevar la semana siguiente un jersey en el que ponga escrito: "Fui el peor del entrenamiento".