El futbolista Santi Mina, condenado a cuatro años de prisión por un delito de abuso sexual a principios del pasado mes de mayo, ha vuelto a trabajar este martes en la ciudad deportiva del Celta de Vigo tras solicitar al club, mediante un burofax, su reincorporación a los entrenamientos porque la sentencia de la Audiencia Provincial de Almería todavía no es firme.

El delantero, al que el Celta pidió sin éxito que no se reincorporarse a los entrenamientos para no dañar su imagen, trabajó sobre el césped con Denis Suárez, Franco Cervi y Joseph Aidoo a las órdenes del recuperador Pedro Docampo, ya que el resto de la plantilla se encuentra de gira en Estados Unidos.

Al exfutbolista del Valencia se le ha visto muy sonriente durante el entrenamiento, pese a ser consciente de que la entidad que preside Carlos Mouriño no cuenta con él para el curso 2022-23.

El pasado 1 de julio, el Celta le concedió 15 días de vacaciones extra para evitar su vuelta al grupo, un periodo que intentó prolongar después de que Mina descartara salir cedido al Aris de Salónica. Mina no aceptó seguir de vacaciones y, mediante un burofax, solicitó su "incorporación inmediata" al grupo, ya que también había expirado el plazo de 60 días que tenía el Celta para despedirlo.