En menos de tres meses Sergio Ramos terminará contrato con el Real Madrid. El capitán blanco no ha renovado y será libre a partir del 30 de junio, cuando finalice oficialmente su vinculación con el equipo blanco, que comenzó allá por el año 2005.

Y el central está viviendo su temporada más complicada con el Real Madrid, a sus 35 años, perseguido por las lesiones y ahora en cuarentena tras haber dado positivo por coronavirus.

Desde el pasado 1 de abril, Ramos se encuentra alejado de los terrenos de juego por una lesión muscular en el gemelo izquierdo. Todo ello después de disputar apenas unos minutos con la selección española de Luis Enrique.

Desde entonces el capitán blanco se encuentra en la grada, animando a sus compañeros, algo que no podrá hacer tras conocerse su positivo por coronavirus, tal y como le ocurrió a Raphael Varane hace unos días.

Ramos se ha perdido dos de los partidos más importantes de la temporada para el Real Madrid: Liverpool y El Clásico ante el FC Barcelona. Tampoco, estará, claro, este miércoles en Anfield, donde los de Zinedine Zidane deberán defender su ventaja de 3-1 para estar en semifinales de la Champions.

Ramos ya se perdió la Supercopa de España por una lesión, además del primer partido del 2021 ante el Celta de Vigo por "una indisposición estomacal".

Sin renovar

Estas complicaciones llegan mientras el central sigue sin renovar su contrato con el Real Madrid. Él mismo se encargó de apuntar hace semanas que "no había ninguna novedad con respecto a su futuro".

Desde el pasado 1 de enero es libre para firmar con cualquier club, aunque se desconocen ofertas contractuales, salvo la del Real Madrid contada por Josep Pedrerol en 'El Chiringuito'.

Nacho y Militao, sobresalientes de urgencia

Al rescate. Nacho y Militao se han convertido en la pareja de centrales de urgencia para Zidane. Y los resultados hasta el momento son sobresalientes. Ambos firmaron grandes partidos ante Liverpool y Barcelona.

Y repetirán en Anfield, aunque quizá con la compañía de Ferland Mendy en el centro de la zaga. El técnico galo podría apostar por un sistema de cinco defensas con Marcelo por la izquierda y la duda de Odriozola y Valverde por la derecha.