España y Argentina se juegan entrar en la historia del baloncesto. La Selección, tras el éxito logrado en 2006, busca un nuevo oro en un Mundial y para ello deberá derrotar a una Albiceleste que, al igual que los de Scariolo, llega invicta a la final de China.
Será un partido complicado para los nuestros, pues los de Sergio han demostrado una solvencia defensiva que les ha llevado a derrotar a equipos con un, a priori, mayor caudal ofensivo. La final será cuestión de detalles, como los grandes duelos que deciden si uno saborea el oro o se tiene que quedar con la siempre menos dulce plata.
Las cinco claves de la final
1. Duelo de bases
Sin duda en la elaboración del juego estará gran parte del partido. Ricky Rubio está siendo uno de los grandes líderes de esta España de Scariolo en China, dando juego, asistencias y anotando cuando la Selección más lo necesita. Eso sí, en Argentina esta Facundo Campazzo. El argentino es el máximo asistente del torneo, y pararlo será fundamental. No será fácil eso sí, pero en una final fácil no hay nada.
2. Dominar el rebote
Si hay un partido en el que va a ser clave hacerse fuerte en la pintura y en la lucha por el balón, es éste. Argentina y España destacan por su potencial defensivo, y quien más flojee en ese sentido puede ser quien termine por recoger la medalla de plata. Esta prohibido concender segundas oportunidades como sí se concedieron contra Australia.
3. Marc Gasol
El pívot de los Raptors es vital en esta selección española. Por lo que ocupa en el campo, por su envergadura y, por supuesto, por su liderazgo. Gasol llevaba un Mundial algo flojo en anotación, pero contra Australia, como dicen, exprimió el bote de kétchump y salió todo a la vez. Se echó el equipo a la espalda, y su aportación en puntos resultó vital. En la final, si está al mismo nivel, será clave.
4. Ojo con las faltas
No son Argentina y España dos selecciones con un gran reparto de minutos entre sus jugadores. Tienen a sus cinco, y luego a los habituales en las rotaciones. Como los Gasol, Juancho, Ricky o Rudy se carguen de faltas puede haber un problema. Y si además se suman Llull, Willy y Ribas, peor aún. En la Albiceleste, lo mismo. Como Campazzo, Scola y Laprovittola se llenen de faltas, los de Sergio González lo pasarán mal. Y se prevé partido intenso.
5. Controlar los nervios y mantener la cabeza fría
Sí, es un aspecto emocional, pero tan importante como cualquier apartado físico de un partido. Es una final, y las finales se juegan con las emociones. Hay que controlarlas, no dejarse llevar y mantener la calma. Tan malo es el exceso de excitación como de confianza, y peores aún son los nervios. Se ha llegado hasta aquí y si se ha logrado es porque hay nivel. No hay que dudar. Hay que mantener la muñeca firme... y también la cabeza.
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