Toda la furia de las guitarras de Barón Rojo concentrada en los surcos de un vinilo de 18 cm. Esta joya de principios de los años 80 es parte de la colección de la Biblioteca Nacional. Catalogar 300.000 vinilos es uno de los objetivos de la institución: "Lo primero es saber quién es el autor del disco, luego necesito saber editor, año el número de catálogo…" explica Mercedes Sénz, técnico de la Biblioteca de Archivos Sonoros.
Desde 1958 es obligatorio hacer un depósito legal de cada obra que se publica, pero en el extenso catálogo también hay donaciones y adquisiciones especiales: "Como es este de '12 poetas en sus voces' que forman parte de lo que llamamos el archivo de la palabra" asegura María Jesús, directora de Archivos Sonoro.
Además de la voz del maestro Rafael Alberti, entre los tesoros sonoros también está una encíclica grabada por el papa Pío XII o unos cuentos de cuna infantiles. Las grabaciones no están digitalizadas y se permite su consulta, sobre todo, a investigadores a los que no solo interesa el sonido.
"A través de las caratulas de los discos estudian la sociología, la forma de vestir, los peinados como se movía la sociedad en ese momento" explica María Jesús López, directora de Archivos Sonoro. Desde su invención a finales de los 50, el formato del vinilo ha permitido explorar formas, colores y tamaños con un punto en común: que los discos giren, y la música suene.