Desde hace años circula por Internet una teoría que apunta a que, desde el año 1993, los episodios de los Simpson no cuentan situaciones reales y sólo ocurren en la cabeza de Homer. Esto se debe a que el padre de la familia amarilla pudo sufrir un coma temporal irreversible. La teoría se basa en un capítulo emitido hace 24 años, en el que Homer conoce a Dios y le plantea la siguiente pregunta: "¿Cuál es el sentido de la vida?". A ello Dios contesta: "Lo descubrirás cuando mueras".

Homer, haciendo gala de su carácter impaciente, contesta: "No puedo esperar tanto tiempo". En este momento es en el que se basan muchos de los fanáticos de la serie para afirmar esta disparatada teoría que va cobrando fuerza siempre que se acerca el final de una nueva temporada de la serie, pues Dios responde a Homer: "¿No puedes esperar seis meses?".

En el décimo octavo episodio de la cuarta temporada pasaron exactamente seis meses desde que Homer hablara con Dios. En este episodio, Bart decide gastarle una broma a su padre con una lata de cerveza muy agitada que explota y que provoca el traslado de Homer a un hospital. Una vez allí, una máquina expendedora de comida se precipita sobre la cabeza del padre de la familia, lo que provoca que Homer sufra un coma.

Una vez que se despierta en el hospital, Marge le cuenta que ha perdido un 5 % del cerebro, pero la teoría defiende que, a partir de este momento, lo que sucede en los siguientes episodios sólo ocurre en la cabeza de Homer en forma de sueños.

Para reforzar este argumento, sus defensores señalan que, debido a que toda la serie se trata de sueños de Homer, los personajes de Lisa, Bart, Maggie y Marge siempre están igual y los niños nunca crecen. Además, añaden que hasta el episodio en el que Homer sufre el coma, la trama de la serie estaba más elaborada, con capítulos en los que Homer intenta dejar la bebida, Lisa se enamora de su profesor o Marge está a punto de ser infiel a su marido.

Pero a partir del polémico capítulo, las historias son más fantásticas. Homer se convierte en astronauta y viaja al espacio, descubren que Skinner es un impostor o, por ejemplo, que el Señor Bruns intenta capturar al monstruo del Llago Ness.

Estos nuevos capítulos solo podrían ser verdad si ocurriera en la cabeza de Homer en forma de sueños, ya que de un capitulo a otro se pasa de historias reales que podrían ocurrir en la vida cotidiana de cualquier familia a historias fantásticas y difíciles de creer.

"Siempre he tenido un final en mente. Creo que sería genial si en el último episodio la familia se prepara para ir al desfile de Navidad y resulta que no es otro que el desfile de Navidad que aparece al principio del primer episodio", dijo en su momento Al Jean, productor y guionista de la serie.

No sabemos si la teoría será verdad o simplemente se trata de una alocada teoría de los más fanáticos de la serie, pero lo que sí sabemos es que desde que se empezó a emitir, la seríe ha sido siempre un éxito y la familia amarilla que vive en Springfield ha divertido a mayores y pequeños a lo largo de más de 25 años.