Que las mujeres puedan llevar pantalones se debe en parte a la moda de los años 20. Es la época de la liberación femenina, también en la ropa.
Entonces se pasó de las muñecas lánguidas de 1910 a un look casi unisex. La ropa dejaba de ajustarse al cuerpo, de marcar el pecho y la cadera, y las faldas se acortaban. La culpa, sobre todo, la tuvo Coco Chanel, que en este momento crea también lo que luego se convirtió en todo un icono: el little black dress o "pequeño vestido negro".
Una revolución en las formas y en el fondo; porque las mujeres quieren equipararse a los hombres. Por eso también se cortan el pelo, y es el momento en el que, por fin, se consigue el voto femenino tras una lucha de casi 80 años.
España tardaría una década más en reconocer el sufragio femenino, pero ya en los años 20 un puñado de mujeres sentaron las bases de todo lo que vino después. Conocidas como "las sin sombrero" tuvieron la, por entonces, "osadía", de quitarse el sombrero en la Puerta del Sol, cuando España atravesaba plena dictadura de Primo de Rivera.
Un gesto de rebeldía que gritaba al mundo que ellas dejaban de conformarse con ser sólo madres y esposas. Y así, más allá de la moda y del lujo, este es el momento en el que nace la mujer moderna.
Lo cuenta la escritora Celia Santos
El 'Plan Marta', el "cruel" programa de Franco y la Iglesia para repoblar Australia con mujeres españolas blancas
En los años 60, cientos de mujeres fueron enviadas a las antípodas con el objetivo de repoblar el país, como cuenta Celia Santos en la novela El país del atardecer dorado.