UN RESTYLING QUE SUENA A DESPEDIDA

Parece que todavía queda un lugar para los sedanes en el catálogo de Volvo

El Volvo S90 de 2025 ha llegado con un restyling que parece un guiño a los que todavía suspiran por los sedanes pero que parece un canto de cisne.

Volvo S90

Volvo S90Volvo

Publicidad

El Volvo S90 de 2025 ha llegado con un restyling que parece un guiño a los que todavía suspiran por los sedanes, pero también huele a que podría ser el último de su especie en la marca sueca. Con los SUV copando el mercado y Volvo yendo a por todas con la electrificación, este S90 híbrido enchufable parece una especie de adiós con clase, un último paseíto antes de que los todocaminos se queden con todo el protagonismo. Han retocado diseño y tecnología para dejarlo bien guapo, y la verdad es que este sedán de lujo sigue teniendo ese rollo elegante que tanto gusta a los fans de Volvo.

El diseño ha ganado un montón de puntos con un frontal que ahora impone más, con una parrilla que parece sacada de un cuaderno de dibujo moderno y unos faros LED con el “Martillo de Thor” que tienen un aire más afilado, además de tecnología Matrix para iluminar la carretera sin molestar a los demás. La silueta está más limpia que nunca, con líneas que destilan clase sin hacer ruido, y la trasera tiene unas luces que encajan como si fueran parte de un mueble nórdico caro. Los nuevos colores metálicos, como Aurora Silver y Mulberry Red, le dan un toque fresco, y las llantas de aleación con corte de diamante, en negro brillante y aluminio pulido, son el remate para que el coche parezca gritar: “¡Mírame!”.

Tecnología y confort para disfrutar

Volvo S90
Volvo S90 | Volvo

El interior del Volvo S90 2025 parece más un piso de diseño que el habitáculo de un coche. La pantalla central ha crecido hasta las 11,2 pulgadas y trae una interfaz nueva que va como un tiro, además de actualizarse para que no se quede desfasada. Los materiales son de esos que dan ganas de tocar, con acabados premium que transmiten calidad, y la insonorización está tan lograda que el ruido del mundo se queda fuera, ideal para hacer un viaje largo sin que el tráfico te saque de quicio. La suspensión adaptativa, que ahora viene de serie, hace que el coche se mueva como si flotara, incluso en carreteras que parecen un campo de patatas.

En mecánica, el S90 apuesta por su versión híbrida enchufable, que da 80 km de autonomía eléctrica según el ciclo WLTP, perfecto para ir al trabajo o hacer recados sin gastar ni una gota de gasolina. Volvo dice que casi la mitad de los kilómetros que hacen sus híbridos enchufables son en modo eléctrico, así que es una opción práctica para quien quiere cuidar el planeta sin renunciar a un extra de potencia cuando toca darle caña. También hay una versión mild hybrid con un motor gasolina de cuatro cilindros, pero el híbrido enchufable es el que lleva la voz cantante, y no es para menos con el rumbo eléctrico que está tomando Volvo.

¿El fin de los sedanes suecos?

En seguridad, el S90 sigue siendo un Volvo de pura cepa, con el sistema Pilot Assist que permite una conducción semiautónoma manteniendo el carril y ajustando la velocidad según el tráfico, para que los viajes sean más relajados y seguros. Pero el futuro de los sedanes en Volvo está en el aire. La marca está centrada en los SUV y los modelos 100% eléctricos, como el futuro ES90, y este restyling del S90 parece una despedida con clase para un tipo de coche que, aunque tiene su público, cada vez se ve más arrinconado por los todocaminos. El mercado asiático, donde este modelo tiene más tirón, podría alargar su vida, pero en Europa huele a que será el fin de una era. Será cuestión de aprovecharlo.

Antena 3» Noticias Motor

Publicidad