Hay más de 100 tipos de alopecia pero la más común de todas, tanto en hombres como en mujeres, es la llamada alopecia androgenética o calvicie común. Por que sí, la pérdida del pelo no es sólo cosa de hombres. Las mujeres también lo sufren, aunque con diferentes particularidades.

Es cierto que la alopecia en general es mayoritaria en los hombres: la alopecia androgenética o calvicie común afecta al 35% de las mujeres en edad fértil y al 50% de las mujeres menopáusicas; mientras que más de la mitad de los hombres mayores de 40 años tiene algún grado, tal y como explicaban a laSexta.com en este artículo especialistas de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV).

No obstante, es cierto que las consultas de pérdida en cabello están aumentado en las mujeres, probablemente por un mayor conocimiento. La causa de esta alopecia -alopecia androgénica o calvicie común- es una predisposición genética y herencia familiar, tanto en hombres como en mujeres. Pero esta pérdida de cabello en ellas se produce de forma diferente: se trata de una pérdida más difusa, especialmente en la parte superior de la cabeza, es decir, se empiezan a ver como zonas de la cabeza más clareadas; y no se suele producir una pérdida de pelo total como sí puede ocurrir en los hombres.

Por esto mismo, el tratamiento de la alopecia androgenética en la mujeres suele ser más de tipo farmacológico -y no tanto quirúrgico- donde el fin principal es el de frenar la caída del cabello. También las mujeres con cierto grado de alopecia pueden ser candidatas a un trasplante capilar, en función de la valoración del especialista. La combinación de diferentes tratamientos farmacológicos y su buen uso (es decir, si se cumple bien el tratamiento) pueden llegar a cifras de hasta un 90% de eficacia. En este artículo podéis encontrar más información sobre alopecia androgenética.

Alopecia areata y otras formas de 'pérdida de cabello'

Después la alopecia androgénica o calvicie común, las alopecia más frecuentes en las mujeres serían las llamadas alopecia aerata, el efluvio telógeno o la llamada alopecia frontal fibrosante.

En cuanto a la primera, la alopecia areata se caracteriza fundamentalmente por una pérdida de cabello en zonas concretas de la cabeza o del cuerpo. Se trata de pérdida o pérdidas de cabello focalizadas en diversas zonas de la cabeza, generalmente con formas redondeadas. En ocasiones, suele afectar también a las uñas. Es un tipo de alopecia que puede darse en la infancia o en adultos jóvenes(aunque puede aparecer en cualquier momento de la vida) y ocurre tanto en hombres como en mujeres. Se desconoce la causa, pero se sabe que tienen un origen autoinmune.

Por otro lado, el llamado efluvio telógeno que consiste en la caída repentina de una gran cantidad de cabello. Suele aparecer en otoño y en primavera o después de ciertos acontecimientos como una situación estresante, una cirugía, un parto, etc, tal explican desde la la página oficial de la Unidad de Medicina Capilar del Hospital Ruber Internacional. De hecho, algunas mujeres después de pasar el COVID-19 sufrieron este tipo de alopecia.

Pero lo más importante y positivo, es que en este tipo de alopecia, el pelo suele revertir y tendría por tanto, un buen pronóstico. Es importante consultar con el especialista para tratar y poner en cada caso, el tratamiento más adecuado.

Por último, nos encontramos con la alopecia frontal fibrosante, que suele afectar a las mujeres en edad postmenopaúsica. Es un tipo de alopecia cicatrizante, ya que el pelo se pierde para siempre dejando, en su lugar, una cicatriz. Según cuenta el Dr. David Saceda, en este video de la AEDV, este tipo de alopecia es muy llamativa ya que se puede perder el pelo de las cejas y el pelo de la cabeza se va a hacia atrás. Puede ocurrir también antes de la menopausia y también, incluso también en varones.

Hasta hace hace relativamente pocos años, no existían tratamientos eficaces para frenar este tipo de alopecia, pero en la actualidad se ha podido demostrar que se puede la pérdida con la combinación de algunos fármacos. Según añade el doctor, en el caso de querer recuperar el cabello perdido, incluido el de las cejas, se podría aplicar un trasplante capitar, después de que, con los fármacos, la alopecia se haya estabilizado durante un tiempo.