El calor no afecta a todas las personas por igual: algunas, debido a su edad, a su situación o a su salud, son especialmente vulnerables. Aunque todos debemos hidratarnos y seguir las recomendaciones para combatir el calor, hay grupos de que tienen un mayor riesgo de sufrir un golpe de calor.

Un golpe de calor es una lesión grave que se produce cuando nuestro cuerpo alcanza los 40ºC. El Ministerio de Sanidad explica que en este estado el cuerpo es incapaz de controlar la temperatura y se producen síntomas como calor, sequedad y piel roja, pulso rápido, dolor intenso de cabeza, confusión e, incluso, pérdida de conciencia. Para evitarlo te contamos qué precauciones debes tomar según tu edad.

Los grupos más vulnerables frente al calor

Según datos de Cruz Roja Española, los grupos que más precauciones tiene que tomar frente a las altas temperaturas son los siguientes:

  • Personas mayores.
  • Personas con enfermedades crónicas o que toman de forma continua determinados medicamentos.
  • Personas con discapacidades.
  • Personas con sobrepeso.
  • Niños y niñas menores de 4 años.
  • Mujeres embarazadas.

¿Cómo afecta la ola de calor a cada grupo de edad?

Menores de 4 años

Según la Asociación Española de Pediatría (AEP), los golpes de calor son más frecuentes en niños que en adultos. Sobre todo en los menores de 1 año, ya que son más frágiles porque tienen menor reserva de agua, lo que hace que su temperatura corporal suba más rápido que en los adultos.

Desde la AEP, recuerdan que nunca se debe dejar un niño solo dentro del coche expuesto al sol, ni siquiera en días en los que parece que no hace calor o que estén nublados. Además, recuerdan que si alguien ve a un niño solo en el interior de un coche se debe llamar al 112, pues este acto puede salvar una vida.

Niños, jóvenes y adultos

Estos días llega la primera ola del verano, que es también la más mortal, tal y como explica Isabel Zubiaurre, jefa de meteorología de La Sexta. Según un estudio del American Journal Epidemiology, la primera ola de calor del verano es la que más muertes trae consigo, por lo que se recomienda extremar las precauciones.

Entre las personas adultas son especialmente vulnerables las que realizan trabajos intensos en el exterior. Según las recomendaciones del Ministerio de Sanidad, se debe reducir su actividad en las horas de máximo calor, protegerse del sol y beber mucho líquido.

El Ministerio de Sanidad también pone el foco en las personas que realizan deporte intenso, recomendándoles evitar las horas de más calor, hidratarse antes, durante y después del ejercicio físico y protegerse del sol con ropa transpirable y crema solar.

Personas mayores y dependientes

Las personas mayores son especialmente vulnerables al calor, especialmente aquellas que viven solas o son dependientes, según explica Cristina Ferrero, del área de Salud de Cruz Roja, en una nota de prensa. Es por ello que esta organización llama a estar “especialmente atentos” con estas personas.

Las personas dependientes, que viven solas o padecen enfermedades crónicas deben de tomar mayores precauciones porque tienen un mayor riesgo de deshidratarse o sufrir una insolación o un golpe de calor.

Entre los consejos que da la organización están: evitar el calor y aprovechar más las horas más frescas del día, mantener el hogar fresco usando las persianas y aires acondicionados, usar ropa ligera y mantenerse hidratado bebiendo agua regularmente. Recuerdan que, si alguien se encuentra mal, se debe intentar buscar un lugar fresco y pedir ayuda.