El expresidente del Gobierno José María Azanar y Mariano Rajoy tuvieron ocasión de saludarse en público en la fiesta de cumpleaños de Vargas Llosa, pero no lo hicieron, no hubo ni un gesto de cordialidad entre ellos. Hubo alguna duda sobre dónde colocarse para las fotos, pero nada más.

Con Vargas Llosa de anfitrión, Rajoy y Aznar sonrieron a la prensa pero ni se miraron. El protocolo no fue sencillo y ambos dirigentes, según ha podido saber laSexta, insistieron mucho en hacer valer sus privilegios.

Casi terminando el discurso el expresidente hizo una reflexión: "Necesitamos nuevos liderazgos a la altura de los desafíos que tenemos ante nosotros".

Un comentario que escuchó Rajoy, sentado en primera fila. Hoy, algún miembro del Gobierno niega que éste fuera un nuevo dardo envenenado al todavía líder del PP. "Era una conferencia en la que hablaba sobre América Latina y yo entendí que los nuevos liderazgos era una apelación para América Latina", señala Margallo.

En el entorno de Aznar aseguran que ayer hacía referencia a un liderazgo global, aunque recuerdan que lo que piensa el expresidente ya lo expresó de forma clara en Génova pidiendo un congreso abierto. Aun así, desde la dirección del PP se han aventurado a interpretar una vez más a su presidente de honor.

"A lo que se refería Aznar ayer era a los cambios políticos que se están produciendo en Latinoamérica", explica Andrea Levy, pero hay quien tiene claras sus preferencias como Esperanza Aguirre, que decía que le ha gustado "más el discurso de Aznar". Reflexiones de Aznar a las que en Génova ya comienzan a estar algo más que acostumbrados.