Mientras el barco de Caja Segovia se hundía, sus directivos iban pensando en ponerse a salvo. A través de polizas de seguros se aseguraban cobrar sus pensiones, por un total de 17 millones de euros, aunque la caja estuviera sin blanca.

En la denuncia presentada por UPyD, se habla de "estampida generalizada". Estaban a punto de entrar en Bankia. "Se trata de una dotación multimillonaria destinada exclusivamente al lucro de un reducido número de personas... un fraude y un privilegio frente al resto de la plantilla".

En Segovia ni PP ni PSOE han querido hacer valoraciones, pero sí la calle. "Desde la desamortización de Mendizábal no ha ocurrido algo tan grave", señala un ciudadano. "Siempre hubo en determinados niveles la idea de que ocurría una cosa extraña", explica otro ciudadano indignado. 

No es el único escándalo relacionado con esta Caja. Para conseguir aprobar estas medidas, la directiva hacía regalos y viajes por valor de 1,2 millones de euros. Supuestas reuniones de trabajos en pleno Carnaval de Venecia. Además, se ocultaron a la CNMV operaciones millonarias de crédito y aval con miembros del consejo de Administración. UPyD ha pedido ya la imputación de 33 directivos de la caja.