Eilean Donan, el castillo del fénix escocés

Fue el escenario de 'Los inmortales', la inolvidable película con Christopher Lambert y Sean Connery. Y un poco de inmortal sí que tiene, porque el castillo de Eilean Donan sabe bien lo que es perecer por completo, así como renacer de sus cenizas cada vez con mayor esplendor. Hasta el punto de que hoy está considerado el más romántico de Escocia. Se encuentra en las Hihglands, en la costa occidental del norte de la isla de Skye, una de las zonas que se conocen bien por la producción de un whisky artesanal excepcional. Ya el mero hecho de divisarlo en la lejanía, en el punto medio que separa los lagos Duich y Long, es suficiente motivo para que merezca la pena haber viajado hasta este confín de Gran Bretaña. Pero lo mejor está por llegar, que es el castillo en sí. Como si fuera un cuento de hadas, el entorno no podía ser más bello, con su puente de piedra, sus murallas antiguas, su tono que refleja el sol al atardecer, el bosque verde y primoroso que lo circunda, las montañas a lo lejos... Decir que es bucólicamente perfecto es quedarse corto. La primera de las fortificaciones que se levantaron en este rincón es del siglo XIII, como defensa de las tierras del rey Alejandro II de Escocia. Luego se fue ampliando hasta cuatro veces, para quedar en ruinas tras un levantamiento jacobita en 1719, cuando queda reducido a cenizas. A principios del siglo XX, un oficial de la Armada Británica, el escocés John MacRae-Gilstrap, comienza las gestiones para volver a levantar el Eilean Donan. Tardará 20 años en hacer realidad su idea, una labor titánica que costó un cuarto de millón de libras de la época. Hoy su tumba se encuentra a los pies del lago. El horario de visita del castillo es de 10.00 a 18.00 horas (excepto en julio y agosto, que abren una hora antes; y del 15 de noviembre al 15 de marzo, que permanece cerrado). La entrada cuesta 6,50 libras, aunque es posible comprar una por familia de hasta cinco personas a un precio reducido. Además, es posible celebrar allí una boda. ¿Alguien se anima a pasar por el altar a lo escocés?