Es frecuente encontrarnos noticias sobre gente que bate récords, pero el que acaba de superar un noruego es "peligroso y gracioso a partes iguales", señala Valeria Ros. Un hombre consigue el récord mundial al saltar al agua desde un acantilado a una altura de más de 40 metros en plancha.

"Eso es hielo, ¿no? Está saltando a qué agua... que no se está tirando en Torrevieja", comenta Quique Peinado, y advierte: "Niños, niñas, esto no lo hagáis en casa". El protagonista se llama Ken Stornes y ha impactado con el agua a 100 kilómetros por hora.

Este deporte, conocido como 'døds', que significa muerte en noruego, consiste en lanzarse al agua al estilo en plancha desde alturas de los 10 a los 14 metros y a mayor panzazo, más puntos. "Sobrevivir da puntos", indica el zapeador. Berta Collado expresa que ella invalidaría este récord porque "no ha dicho la frase que se dice en estos casos: ¡Mamá, mira!".