¿Cuál es el origen de la expresión 'duro de pelar'?: así nacieron esta y otras expresiones españolas

En el castellano hay muchas expresiones de uso habitual pero, ¿sabemos cuál es su origen? Zapeando hace un repaso por alguna de estas frases y desvela su origen. 'Echarle el muerto a alguien', que se usa como sinónimo de echarle la culpa a otro, tiene su origen en la Edad Media. Como explica Miki Nadal, "cuando se cometía un crimen y no era resuelto los habitantes del lugar estaban obligados a pagar una multa. Para librarse de la multa muchos no decía nada y, por la noche, se lo llevaban al pueblo vecino".

La expresión 'poner mirando a Cuenca' se acuño gracias a Felipe el Hermoso. Isabel Forner explica que el monarca montó un mirador en una torre para ver desde allí su reino y, además, reunirse ahí con sus múltiples amantes. "Cuando quería engañar a la reina Juana I de Castilla le decía que llevaba a otra dama al observatorio". Sus guardas decidieron comenzar a usar esa expresión que se ha mantenido hasta nuestros días.

'Hacerse el sueco' es otra frase muy popular que, curiosamente, no tiene nada que ver con Suecia. "La expresión viene del latín 'socus' que se refería a un tipo de calzado que usaban los cómicos en el teatro romano", argumenta Cristina Pedroche. Los actores hacían el tonto para hacer reír al público, 'socus' derivó en zueco, el zapato, y en zoquete para hablar de alguien tonto pero se mantuvo el término 'sueco' en la expresión.

Otra expresión muy popular es 'mucha mierda', utilizada por los actores para desearse suerte. Su origen se remonta al siglo XVI cuando los nobles y ricos acudían al teatro en carruajes. "Donde hay carruajes, hay caballos y, donde hay caballos, hay caca de caballo", indica Dani Mateo. "Se consideraba que a más caca en la puerta, más espectadores y más dinero habían ganado los actores", concluye.

Cuando hablamos de algo complicado usamos la expresión 'duro de pelar'. Esta expresión también es de la Edad Media y, como cuenta Mónica Cruz, "entonces se utilizaban pieles de animales para hacer abrigos, bolsos y carteras". La zapeadora explica que un animal muy popular era el gato y muchos cazaban gatos para desollarlos. "Como eran muy escurridizos se les consideraba difíciles de despellejar", concluye Mónica, bastante disgustada.