Lola Flores fue una folclórica que rompía con esa imagen de la mujer como ama de casa y madre perfecta. Era la matriarca, la que triunfaba en la familia y la que mostró a las mujeres que podían ser y vestir como quisieran sin importar lo que dijera el marido. Así lo demostraba en un reportaje para la revista Lecturas en 1971 donde aseguraba que si a su esposo, 'El Pescaílla' "no le hacía gracia su ropa, que se acostumbre".

"Una particularidad de Lola Flores era la libertad con la que siempre se expresó,  y cómo tuvo el valor para narrarse a sí misma y su historia en un momento en que no era frecuente que las mujeres fueran así de sinceras", explica en el vídeo sobre estas líneas Lidia García, autora de '¡Ay, campaneras!'.

En la miniserie 'El coraje de vivir', Lola Flores repasaba su vida, sin omitir ningún detalle por incómodo que fuera. En 1994 habló de su relación con el cantaor Manolo Caracol y fue rotunda: "Después los celos, los insultos delante de la gente, me maltrataba". "El hecho de contar su propia historia de manera tan cruda, de manera que tan poca gente hablaba, creo que Lola Flores, en ese sentido, fue una adelantada a su tiempo", comenta García a laSexta Columna.

"Tenía que reparar todo aquel daño"

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