Xavier Sardà ha relatado en Palo y Astilla cómo vivió la muerte prematura de su madre, cuando él tan solo tenía ocho años. Asegura que dejó de verla a los "siete años" y que tiene "recuerdos muy difusos" de ella.

Cuando su madre enfermó, Sardà tuvo que irse con sus abuelos a Montcada i Reixac, cerca de Barcelona donde pasó "una temporada escolar": "Mi adversidad era más no estar en casa que lo que estaba sucediendo en realidad".

Además, ha señalado que al preguntar a sus abuelos por qué no se apellidaban Sardá ni Tàmaro descubrió que tenía "unos abuelos postizos". "Murió tu abuelo, yo me casé con tu abuela, tu abuela murió y yo me casé con esta señora", le confesó su abuelo "falso".

Sardà ha explicado que la noticia de la muerte de su madre se la dijo una "tía de su abuela falsa": "Me dijo 'tu madre se ha ido al cielo'. Le daban más importancia los que me lo decían que en realidad yo, no sabía que decir".

Otro momento destacado

Xavier Sardà explicó en Palo y Astilla que su padre falleció cuando él estaba en el Servicio Militar y Mamen Mendizábal le preguntó si sentía sensación de orfandad. "La orfandad, una vez se muere tu padre, crees que ya no la vas a experimentar más. Pues hay más muertes que generan sensación de orfandad en la vida. Hay otras, de amigos, de personas muy queridas que cuando desaparecen tienes exactamente la misma sensación", dijo en la entrevista, realizada poco antes de la muerte de su hermana Rosa María.