Siete jóvenes están siendo investigados por delitos contra la integridad moral y coacciones por las novatadas que hicieron a los estudiantes nuevos de la residencia madrileña de Galdós.

Arrodilladas, acorraladas y con las manos detrás de la espalda, las novatas fueron forzadas entre gritos e insultos a comerse un pescado crudo. Es una novatada que se conoce como el 'San Jaime', y es el castigo por haberse saltado una regla de la residencia: el primer mes los novatos no pueden ligar.

Las recién llegadas fueron humilladas sin piedad durante tres interminables horas, para gozo y disfrute de quienes las rodeaban. También las hicieron comer galletas de perro o beber un litro de vino conteniendo la respiración hasta perder la conciencia. Mientras, eran grabadas e insultadas al grito de "guarra" o "puta". A algunas incluso les escupieron en la cabeza.

Fue el propio director de la residencia quien, al ver las imágenes, contactó con la Policía Municipal de Madrid, que abrió la investigación. Además de identificar a las novatas agredidas, entre las que hay dos menores, lograron identificar a los siete jóvenes a los que ahora se les investiga por las agresiones. Algunos de ellos ya no vivían en la residencia.