Un robo de película no tuvo en lugar en una de las salas de los cines Capitol, sino en su oficina. Era domingo por la noche cuando dos encapuchados llaman a la puerta de las oficinas del cine. En ese momento un trabajador les abre creyendo que se trataba de una compañera y es amenazado con un arma de fuego. Le pidieron todo el dinero que en ese momento estaba contando.

Además, forzaron la caja fuerte y otras de las cajas con candado. En total, se llevaron alrededor  10.000 euros, es decir, toda la recaudación del fin de semana. Al huir dejaron al trabajador encerrado y maniatado con bridas dentro la de la oficina y pasada una hora y cuarto del robo, llegó una compañera del trabajador que lo encontró gritando y pidiendo auxilio. Hasta el lugar de los hechos se desplazaron la Policía y los bomberos para poder abrir la puerta.

Sin embargo, no es el último robo que ha ocurrido en la zona. Un dependiente de una zapatería cercana cuenta: “En el mes de julio nos robaron también a nosotros aunque estábamos cerrados, no había ningún trabajador dentro y al parecer entraron de noche.”