El asesino confeso de Toñi, Miriam y Desiré sale en libertad. Aunque a esta ahora la Asociación Clara Campoamor asegura estar buscando cualquier resquicio legal para evitarlo. Con 44 años recién cumplidos, Ricart se prepara para recuperar su vida. Y, en principio, no tiene a dónde ir ni familia que le acoja. En su caso, su rostro, es uno de más brutalmente reconocibles. Un apestado social al que le costará aún más encontrar trabajo.

Ricart y su triple crimen están en la memoria de todos, aunque han pasado dos décadas, y podría haber cambiado. En este tiempo nunca ha salido de prisión, ni siquiera utilizó el único permiso de fin de semana que le concedieron.

Desde Herrera de la Mancha, en Ciudad Real, Instituciones Penitenciarias tampoco ha desvelado su posible destino en libertad, aunque podría volver a Valencia, a Catarroja. Allí ya han declarado que no le quieren.

Aún así podría esperarse que también en su caso la Fiscalía solicitara una libertad ambulatoria vigilada. Lo que está claro es que la Audiencia de Valencia ha decidido su excarcelación sin contar con la aprobación de la Abogacía del Estado. Jorge Fernández Díaz Ministro de Interior: "Estamos coordinados con la fiscalía para garantizar la seguridad ciudadana".

Recuerden que, condenado a 170 años por el tripe asesinato de las niñas, le quedaban 10 años en prisión; de acuerdo con la Doctrina Parot habría salido el 19 de enero de 2023.

Hace justo 10 años cuando todavía ni siquiera tenía aplicada la doctrina Parot la familia de la víctimas temían su libertad: "¿Para qué le condenan tantos años si ahora a los 10 años esté en la calle?, es una injusticia", se pregunta Fernando Gómez, padre de Toñi.

A día de hoy Miguel Ricart, al que llaman El Rubio, saldrá sin vigilancia y sin terapia cumplida. En prisión nunca se ha sometido a ningún tratamiento para agresores sexuales. Agresivo, antisocial, narcisista, rayando la psicopatía, el asesino de las niñas de Alcásser en breve andará suelto.