A la familia de Julián Beleña sólo le queda una foto en blanco y negro de él. Tal y como le describe su hermana, Julián era una persona a la que le gustaba conocer otras culturas.

Aventurero y natural de Teruel, apenas tenía relación con sus hermanos. Ellos vivían en Valencia y, mientras, él recorría el mundo. Así, durante más de una década el paradero de Julián fue una incógnita para toda su familia. Hasta el año 2002, cuando finalmente recibieron noticias suyas.

"Llamaron para decir que habían encontrado unos restos en abril del 2002 en Marruecos", ha explicado Catalina. El esqueleto del hombre de 48 años apareció en un desierto de Marruecos, a 11 kilómetros de la ciudad más cercana. Concretamente, debajo de un árbol y sin signos evidentes de violencia.

La pregunta que se hace la familia es cómo sabía la Gendarmería Real de Marruecos que se trataba de Julián antes de corroborarlo siquiera con un análisis genético, ya que a su hermana, Catalina, le tomaron muestras hasta en dos ocasiones en 2002 y 2011, pero antes de aquello ya le confirmaron que se trataba de su hermano.

Sobre cómo murió Julián, Marruecos da una sencilla explicación: como llevaba un torniquete en un dedo, moriría de la picadura de un insecto. Una versión que su familia jamás creyó.

"Sinceramente creo que sería retenido en algún sitio durante ese mes que no estuvo. Que alguien lo mató, lo llevaron a un descampado y allí apareció", ha expresado la hermana, que está convencida de que se trata de una muerte violenta.

Catalina es la única que sigue reclamando una respuesta a día de hoy. Su empeño la ha llevado hasta la Audiencia Nacional. Quiere que un nuevo forense examine los restos de manera oficial, en España, porque por su cuenta sólo ha logrado que alguien evalúe sobre el papel lo que hicieron en Marruecos.

Para resolver las dudas sobre el crimen necesitan desenterrar el cuerpo, que ahora reposa no muy lejos del lugar donde apareció sin vida, en la llamada Puerta del desierto. Cómo llegó hasta allí Julián Beleña todavía es un misterio que lleva 18 años sin resolver.