El acuerdo para elevar el salario mínimo interprofesional (SMI) en España está próximo a concretarse, según la confirmación de la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. La propuesta, respaldada tanto por sindicatos como por la patronal, sugiere un aumento del 4%, alcanzando los 1.123 euros mensuales. Una cifra intermedia entre las exigencias del 5% por parte de los sindicatos y el 3% propuesto por los empresarios.

Cerca de dos millones y medio de españoles, el 13,7% de la población asalariada, perciben el salario mínimo interprofesional. Este impacta de manera desigual en género y edad, siendo más del doble de mujeres que hombres quienes lo reciben: un 25% frente al 11%. Los jóvenes menores de 24 años, así como los trabajadores del campo, conforman los grupos con mayor incidencia en esta remuneración, afectando al 30% y al 50%, respectivamente.

A pesar del incremento del 47% desde 2018, el SMI español se sitúa en una posición media en comparación con Europa. Luxemburgo lidera la lista con más de 2.000 euros al mes, mientras que España ocupa el octavo lugar, por delante de Portugal. En algunos países europeos, como Dinamarca y Suiza, la fuerte influencia sindical elimina la necesidad de establecer un salario mínimo, evidenciando las variaciones en las políticas salariales a nivel continental.

La propuesta del Ministerio de Trabajo, al elevar el SMI un 4% para 2024, marca un hito en las negociaciones entre sindicatos y empresarios. Aunque las posturas no han variado significativamente en la última reunión, la vicepresidenta Yolanda Díaz se compromete a abordar el tema de la indexación del salario mínimo interprofesional en contratos públicos con los Ministerios de Economía y Hacienda, buscando un acuerdo que satisfaga ambas partes.