La victoria de Ucrania en Eurovisión no ha sentado bien al Gobierno ruso, como era de esperar. Los políticos del Kremlin y los medios de comunicación afines a Vladímir Putin califican la clasificación alcanzada por la candidatura ucraniana, de un total de 631 puntos tras sumar los votos del jurado y del público "de humillación a Eurovisión y a toda Europa".

"Yo pensaba que los espectadores europeos y los organizadores no permitirían que les humillaran y resulta que humillar a Europa es tendencia", ha defendido Maria Zajárova, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores en Rusia.

Al Gobierno no le ha sentado bien y los medios públicos como 'Moscú 24' optan por lanzar sospechas sobre la votación, y sin decirlo, dejan que el espectador llegue a la conclusión de que la victoria fue ilegal. "Algunos participantes han acusado de manipulación en las votaciones. Se han quejado Rumanía, Azerbaiyán y Georgia. Espero que hayan pillado todo esto. Por ahora, lo único que sabemos es que ha ganado Ucrania", ha mantenido un presentador de este canal.

Lo cierto es que la banda ucraniana Kalush Orchestra con su canción 'Stefania' no solo ha dado la victoria al país por tercera vez en su historia, sino que ha logrado que el voto telemático, el del público, se rindiese a su actuación. Muchos ven en la gran cantidad de votos recibidos una muestra de apoyo al país durante la invasión de Rusia.