Los vendedores de Ozempic tratan de multiplicar su valor a través de Telegram, donde venden 10 inyecciones por 2.200 euros. Equipo de Investigación descubre que el vendedor es siempre el mismo y que reside en Valladolid, por lo que decide trasladarse hasta allí y consigue dar con él. El hombre acepta ser entrevistado y cuenta su versión de los hechos.

"A mi me llamó un señor y yo le pedí unas píldoras que me habían dicho que eran muy buenas para hacer ejercicio. Y yo le dije que no me lo podía permitir. Y me dijo: 'Te voy a hacer millonario porque estás arruinado; haz esto y cuando te llegue el dinero me lo mandas a esta cuenta y te doy un 20%'", señala.

Según el presunto intermediario, este preguntó si se trataba de algo legal, y le dijeron que sí. "Te juro por Dios que yo no sé qué producto es ese; no lo he visto en mi vida", expresa al ser preguntado por Ozempic. Y al indicarle el reportero que, como intermediario, está participando de una actividad ilegal, el hombre asegura que no sabía nada.