En pleno corazón de la bahía de Cádiz, un centro de investigación público dirigido por la Junta de Andalucía investiga un nuevo cereal muy completo nutricionalmente y que podría acabar con los problemas de abastecimiento por la guerra en Ucrania.

Se trata de un grano 100% marino que se alimenta de agua salada. La FAO ha calificado este nuevo alimento como un descubrimiento que puede cambiar la historia de la alimentación humana.

España dispone de más de un millón de kilómetros cuadrados de aguas marinas donde se podría cultivar este nuevo cereal. "La planta no tiene predadores, no necesita fitosanitarios, no necesita fertilizantes, pero todo eso es lo que estamos ensayando en estos cultivos experimentales con la que soñamos algún día poder aportar y alimentar al mundo", ha indicado Juan Martín, ambientólogo.