Equipo de Investigación viaja hasta Córdoba para hablar con Carlos Muñoz, un camarero que denunció a su exjefe ante Inspección de Trabajo por las condiciones laborales en las que estaba contratado. "Yo estaba oficialmente contratado por 10 horas semanales pero yo echaba sí o sí unas 40", reconoce. Esas 30 horas de más las cobraba en negro. "Al final de mes el jefe nos mandaba a una especie de sótano que tenía dentro del bar y ahí nos daba en mano en un sobre lo que era la cantidad total del sueldo", cuenta.

Lo que más lamenta el joven es que se trate de una práctica "bastante usual" en el mundo de la hostelería. "Si quieres comer y pagar el alquiler, tendrás que pasar por el aro".

Carlos no recibió el contrato hasta tres meses después de comenzar a trabajar en este establecimiento y por insistencia suya. Cuando por fin estuvo en sus manos, descubrió que su categoría era de "ayudante de cocina". Los horarios que recogía el documento eran surrealistas. "De 14 a 15 h y de 22 a 23 h", lee con sorpresa la redactora de Equipo de Investigación.

"Si tú cotizas 10 horas en vez de 40, ¿qué pasa? Que cuando llegas a ver los días cotizados para conseguir el paro, me encuentro que de los 8 meses que había trabajado, había cotizado 15 ó 20 días. Entonces, claro, no puedes ni tan siquiera pedir el paro", relata Carlos.

Esta fue la gota que colmó el vaso y le dio el empujón para denunciar a su jefe ante Inspección de Trabajo. En el grupo de WhatsApp del trabajo avisaron a sus empleados que estaban allí los inspectores y les dieron las pautas para lo que tenían que responder ante sus preguntas. "Tenéis que decir que estáis dos horas trabajando. Y si os preguntan si tenéis grupo de WhatsApp o algo, decís que no tenéis. Recordadlo, que es muy importante, ¿vale?".

*El contenido al que hace referencia esta información corresponde a un programa de Equipo de Investigación de 2022 que laSexta ha vuelto a emitir.