El Objetivo se adentra en bulos históricos con los que hemos estado engañados toda la vida para demostrar que el fenómeno de la desinformación no es algo nuevo. Uno de ellos nos lo descubre el historiador Javier Traité, que nos explica que el gesto del pulgar hacia abajo no era utilizado por los emperadores romanos para marcar una sentencia de muerte.
La realidad es que el pulgar hacia arriba era el que marcaba la sentencia de muerte, ya que se refería a cortar la yugular. Y para pedir clemencia había otro gesto muy diferente. Nos lo cuenta el historiador en el vídeo de la parte superior.