Fiel a la vocación de El Intermedio de defender causas justas, Cristina Gallego se convierte en embajadora de la 'ADDAD', Asociación en Defensa de los Animales Disecados, una organización que, como ella mismo afirma, solo tiene dos socios: "Yo y Juan Carlos I".

La colaboradora de El Intermedio se ha mostrado totalmente contraria a que la fundación animalista Franz Weber le quiera arrebatar al rey emérito su pabellón de caza en la Zarzuela para convertirlo en un Museo del Ecocidio. Junto a Dani Mateo, Gallego ha analizado, rifle en mano, este lugar de 1.700 metros cuadrados con más de 500 animales disecados, entre ellos elefantes, jirafas o rinocerontes, que costó a las arcas públicas 3,4 millones de euros, pues lo pagó Patrimonio Nacional.

"Dicen que diseccionar animales muertos está mal, hay otros que coleccionan Funkos y no les decís nada", argumenta Gallego en el vídeo sobre estas líneas, donde también habla de la cámara acorazada de 200 metros cuadrados que se encuentra en este pabellón y en la que el rey emérito guarda sus armas, entre ellas un rifle de caza con el escudo de la corona española e incrustaciones de oro de 24 quilates.

"¿Por qué perder esa bonita tradición?"

"El maldito Gobierno feminazi va a prohibir los piropos, ahora va a ser delito la cosa más bonita que ha dado la lengua española", ironiza en este vídeo Cristina Gallego al escuchar a Carla Toscano, de Vox, criticar la ley del 'solo sí es sí'.