En pleno tira y afloja entre la patronal y los sindicatos sobre la cuantía de la subida del salario mínimo interprofesional (SMI), Gonzalo Bernardos defiende en Al Rojo Vivo que debería subir "mínimo" un 4%.
El economista cree que "la inflación se puede quedar el año que viene entre un 2,5 y un 2,7%". Además, defiende que "las personas que están cobrando lo mínimo en España tienen que poder llegar mejor a final de mes" y "progresivamente" el SMI debe irse aproximando al 60% del salario medio.
Así, considera que "una ganancia de aproximadamente 1,5 puntos de poder adquisitivo estaría muy bien" y apuesta por una subida del 4,2%.