La investigación sobre la muerte por ahogamiento de dos soldados el pasado 21 de diciembre mientras participaban en maniobras militares en Cerro Muriano, ha revelado que uno de ellos contaba con lastre en su mochila por un "castigo".

El abogado de uno de los fallecidos, Luis Romero, ha indicado que se produjeron una serie de negligencias que provocaron este trágico final. Por ejemplo, ha explicado que el capitán de Cerro Muriano ordenó a los soldados no agarrarse a la cuerda del lago salvo "caso de vida muerte".

Además, ha confesado que solo contaban con una ambulancia que se encontraba a 15 minutos de distancia. "Tuvieron que llamar al 112 por orden del capitán", ha destacado, confesando que los bomberos y la ambulancia tardaron a llegar.

"No había medidas para socorrer en caso de accidente", ha denunciado, asegurando o que tampoco se cumplió con las normas de seguridad e higiene en el trabajo. "No había una prevención de riesgo clara, por eso hacemos responsable al capitán y a toda la cadena de mando".

Luis Romero ha indicado que esta maniobra, en la que algunos de los soldados portaban mochilas que podían pesar hasta 12 kilos, formaban parte de un castigo por no haber hecho bien un ejercicio. "No está permitido que se haga este ejercicio con una mochila que no flota", ha señalado.