El Tribunal Militar de Sevilla se hará cargo de la investigación por la muerte por ahogamiento de dos soldados el pasado 21 de diciembre mientras realizaban una maniobras acuáticas en la base de Cerro Muriano (Córdoba).

El abogado de la familia de Carlos León, uno de los soldados fallecidos en estas maniobras, ha indicado en Al Rojo Vivo que se cometieron una serie de negligencias. Para empezar, Luis Romero ha destacado que habían indicado que las mochilas que tenían que llevar, y que pesaban hasta 12 kilos, servían de flotadores, algo que ha asegurado que no era cierto.

Además, ha destacado que, si decidían soltarlas, podían enfrentarse a "una sanción importante". Por este motivo, todos decidieron ir corriendo a la cuerda que había, pero ya estaba semihundida. "El capitán dio la orden de soltar la cuerda con la intención de que hiciese un efecto látigo".

Sin embargo, esto no funcionó y otros militares tuvieron que entrar al agua, corriendo el riesgo de sufrir hipotermia.

Luis Romero ha destacado que estas maniobras formaban parte de "un castigo por no haber hecho bien un ejercicio", destacando que "no está permitido que se haga este ejercicio con una mochila que no flota, y muchos menos que llevaran cuatro kilos más".