Maricela tiene una hija de seis años. Tras más de una década trabajando como camarera de piso, vio cómo la pandemia se lo llevaba todo por delante e incluso las echaban de su casa, por lo que se vieron obligadas a compartir piso con una amiga para afrontar los gastos del día a día.
"He tenido que renunciar a muchas cosas", relata. "En tema de comida, lo justo y necesario, sobre todo para la niña", agrega Maricela, cuya situación se parece a la de Cristina, madre de tres hijas. "Mi vida desde que empezó la pandemia ha ido a peor porque no tengo ningún recurso, no tengo ninguna ayuda, no tengo nada", lamenta.
"Ellas saben que es lo que nos ha tocado vivir y que tarde o temprano esto tiene que cambiar", explica Cristina sobre sus niñas; ahora solo trabaja un par de horas a la semana, llegar a fin de mes les resulta prácticamente imposible.
Según UNICEF, en España uno de cada tres niños y niñas vive en riesgo de pobreza o exclusión social, lo que supone 2,3 millones de menores en esta situación. Además, a nivel europeo nuestro país está a la cabeza en el índice de pobreza infantil, junto con Rumanía, Bulgaria e Italia, según explica Cristina Junquera, responsable de Incidencia Política y Estudios de UNICEF.
La Comisión Europea quiere romper ese círculo de pobreza y para ello sigue apostando por la llamada Garantía Infantil Europea, una iniciativa que, según precisa Cristina Perazzo, directora de Políticas de Infancia de Save the Children, "insta a los países miembros a introducir las medidas que garanticen que cualquier niño o niña en situación de pobreza o vulnerabilidad tenga acceso efectivo a servicios en ámbitos clave para su desarrollo", que incluyen la sanidad, la educación, la vivienda y la nutrición.
España, junto a otros Estados de la Unión Europea, se ha comprometido a crear un marco político para orientar políticas e impulsar estrategias que erradiquen esta situación. En este sentido, el presidente Pedro Sánchez afirmaba el pasado mes de noviembre que "no es vergonzante reconocer que hay pobreza infantil en nuestros países", sino que "lo vergonzoso sería no tomar medidas ambiciosas al respecto".
El objetivo ya lo ha marcado la Comisión Europea: sacar de la pobreza a cinco millones de niños y niñas para el año 2030, según indican desde UNICEF, que estima que en 2030 la tasa de pobreza seguirá afectando a un 26,5% de los menores en España. Para conseguir ese objetivo europeo, apuntan, se necesitan medidas reales y ayudas directas, de tal forma que menores como los hijos de Maricela o Cristina puedan tener un día a día sin tantas dificultades.