En el marco de la
iniciativa del 'Lazo Marrón' que ha puesto en marcha el sindicato para
denunciar "la subida de mierda de las pensiones", UGT se ha propuesto
recopilar todas esas cartas y mandarlas de vuelta al Gobierno con el objetivo
de que mostrar así la "indignación" de los pensionistas con su
subida.
En el caso de que no
pudieran entregar las cartas en las sedes del sindicato, UGT anima a los
pensionistas a devolverlas al Gobierno, sin abrirlas, e incluyendo en el
membrete, escrito a mano, que se rehúsa a su procedencia porque "la subida
del 0,25% es una mierda".
El sindicato cree que el
Ejecutivo, en lugar de gastarse el dinero en enviar millones de cartas a los
pensionistas, podría haberlo invertido en mejorar la "insuficiente"
cuantía de las pensiones y en trabajar para que éstas suban conforme al
crecimiento económico y la inflación.
UGT realizará un acto
sindical para llevar a efecto la entrega de las cartas de nuevo al Ejecutivo,
como un "gesto colectivo de rechazo" al "raquítico"
aumento, "que en realidad es un recorte de las pensiones".