Meghan DiGiacomo llevaba un tiempo desaparecida y sus padres consiguieron encontrarla, de casualidad, gracias a un programa de la CNN sobre drogadictos sin hogar. Meghan residía en la llamada "Milla de la heroína", un tramo de Boston que se ha convertido en refugio para los adictos a la droga.
Un reportero se desplazó hasta allí para entrevistar a la joven que hablo sobre su adicción a la heroína y sus esfuerzos por intentar desengancharse de las drogas. Cuando los padres de Meghan vieron a su hija por televisión se sintieron muy aliviados al verla viva: "Nunca me rendiré con Meghan. Ella no va a morir", ha asegurado su madre en una entrevista en 'Daily Mail'.
Tras esto, el padre de la joven cogió un vuelo para reencontrarse con su hija y ahora se ha mudado a las calles de Boston con ella para ayudarla.