Vestidas de deporte y entrenando para lo que llevan haciendo toda la vida: luchar contra la desigualdad. "Este 2019 es la segunda prueba de 'Yo no renuncio por la conciliación' porque seguimos teniendo los mismos obstáculos en nuestra carrera diaria las mujeres profesionales hoy en día", defiende Laura Baena, fundadora del Club de Malasmadres.

Para formar parte de este grupo, que reúne a más de 700.000 mujeres en toda España, no hace falta ser buena corredora, porque más allá de lo simbólico de los ejercicios, lo que están mujeres buscan es combatir "el techo de cristal, la desigualdad, las tareas invisibles, la falta de corresponsabilidad, la brecha salarial, y tantos obstáculos que nos hacen difícil el poder conciliar".

Quieren que a través de iniciativas como estas su voz, la de todas, llegue a las fuerzas políticas: "Para nosotros lo más alarmante es que 6 de cada 10 mujeres renunciamos a nuestra carrera profesional al ser madres", recuerda Baena. Como el caso de María Fernández, exbailarina del ballet nacional: "He sido despedida de la empresa cuando estaba embarazada de seis meses".

Por eso ahora, ellas, entrenan para la segunda edición de esta carrera simbólica que como meta tiene la conciliación real. "La conciliación empieza mucho antes, incluso cuando te planteas tener un hijo", defiende María Fernández. Exigen más protección legal para la mujer en estos ámbitos. De momento se preparan así para conseguir, en movimiento, que la sociedad también avance con ellas.