El autobús escolar quedó completamente volcado y los estudiantes intentaron salir como podían. "Estaba todo el mundo llorando, intentamos romper el cristal de atrás e intentamos salir todos", afirma uno de los menores que iba en el vehículo.

Se dieron cuenta de todo. "He notado que se ha empezado a poner a dos ruedas el autobús y sabía que volcábamos, me he intentado sujetar a lo que he podido y me he caído", afirma otro de los pasajeros.

21 niños de los 44 que viajaban han resultado heridos y también el conductor. Afortunadamente ninguno de gravedad, sólo tienen golpes, cortes y magulladuras. Pero el susto para los padres ha sido inmenso: "Gracias a dios no le ha pasado nada, me avisó desde la ambulancia de que no pasaba nada pero el momento de llegar y ver el autocar volcado fue tremendo".

El susto ha pasado a indignación al conocer que el joven conductor ha dado positivo por cocaína por lo que ha sido detenido. “Espero que le quiten el carné de por vida, porque llevas a chavales no llevas paquetes", afirma un padre, mientras que otra madre afirma que "esto te desespera": "Ha podido cargarse la vida de mi hijo y la de muchos otros".

El dueño de la empresa de autocares aún estaba en shock. Aún se desconocen las causas del accidente, aunque los alumnos aseguran que solía conducir a mucha velocidad: "Días antes sabía que este conductor iba muy rápido y que algún día iba a pasar".

Aún falta por confirmar el positivo en el laboratorio, pero el narcotex realizado es muy fiable, detecta el consumo en las últimas 24 horas, y sólo tiene un 2% de margen de error.

El autobús apenas acababa de iniciar su ruta, desde esta urbanización hasta el instituto Jimena Menéndez Pidal, apenas cinco kilómetros que recorren cada día en unos diez minutos. Un trayecto que hoy ha acabado en el hospital.